Madre,
eres fuente de inspiración,
sol de mi vida,
mis pasos alumbras con devoción.
Por navegar en tus entrañas,
al infinito universo doy
gracias hoy.
Con alegría esperabas
un inocente hijo varón,
pero en su momento justo
una sonrisa, un puñito cerrado,
un beso tierno de tus labios de rosa
recibiste a la niña que soy yo,
milagro de la vida, ese momento!
Madre, eres mi adoración.
Antes que nada,
Madre,
única, suave, abnegada,
siempre con brazos abiertos,
cultivando tus retoños,
acurrucando sueños.
Eres, el origen de mi ser,
valiente, inteligente, tenaz.
A la vida te aferraste,
cuando perdida te sentías y
letras y versos escribiste,
con roja sangre, la tinta.
Partir fue tu deseo,
cuando la sombra obscura llego,
mas tu amor, al fin de madre,
te quedaste y triunfo.
Esbelta y perfumada gardenia,
luz que alumbra,
flor de reseda,
amor sin reservas, eso y aun más.
Días de vigilia,
el cansancio no perdono,
eres amorosa y tierna,
a la hora de la comprensión.
Noches serenas
llegan a mi mente,
tu pelo azabache
ondulado por el viento.
Piel suave blanca,
coral son tus labios,
viejas canciones arrancaba tu voz,
boleros, mariachis, tangos,
en la noche silente solo se escuchó.
Son esos recuerdos
Mi Madre Querida,
los que siempre guardo
en mi corazón.
eres fuente de inspiración,
sol de mi vida,
mis pasos alumbras con devoción.
Por navegar en tus entrañas,
al infinito universo doy
gracias hoy.
Con alegría esperabas
un inocente hijo varón,
pero en su momento justo
una sonrisa, un puñito cerrado,
un beso tierno de tus labios de rosa
recibiste a la niña que soy yo,
milagro de la vida, ese momento!
Madre, eres mi adoración.
Antes que nada,
Madre,
única, suave, abnegada,
siempre con brazos abiertos,
cultivando tus retoños,
acurrucando sueños.
Eres, el origen de mi ser,
valiente, inteligente, tenaz.
A la vida te aferraste,
cuando perdida te sentías y
letras y versos escribiste,
con roja sangre, la tinta.
Partir fue tu deseo,
cuando la sombra obscura llego,
mas tu amor, al fin de madre,
te quedaste y triunfo.
Esbelta y perfumada gardenia,
luz que alumbra,
flor de reseda,
amor sin reservas, eso y aun más.
Días de vigilia,
el cansancio no perdono,
eres amorosa y tierna,
a la hora de la comprensión.
Noches serenas
llegan a mi mente,
tu pelo azabache
ondulado por el viento.
Piel suave blanca,
coral son tus labios,
viejas canciones arrancaba tu voz,
boleros, mariachis, tangos,
en la noche silente solo se escuchó.
Son esos recuerdos
Mi Madre Querida,
los que siempre guardo
en mi corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario